Vanessa
Zamora

Tornaluna Pocket


SCORE: 5.8 Julieta Venegas de 10

 
 
 

Con dedicatoria a sus padres, Vanessa Zamora presenta versiones desnudas e íntimas de los tracks que le dieron vida a Tornaluna (2018). El resultado es un EP bastante afable y orgánico que deja al descubierto el alto nivel de entrega de esta canta-autora; sin embargo, también acentúa sus áreas de oportunidad.


El 2018 representaba una etapa bastante importante para Vanessa Zamora, pues era el año en que le mostraría al mundo una nueva fase en su carrera musical. En sus entrevistas para promocionar su disco a estrenar, se mostraba emocionada y no podía dejar de proyectar el orgullo que sentía por haber podido completar esta obra. Su optimismo era bastante contagioso y era difícil no preguntarse "¡Wow! ¿Realmente será así de bueno?". Cuando el tan anticipado 5 de octubre llegó, la recepción fue bastante generosa y acogedora, celebrando la madurez en el sonido de Vanessa.

Tornaluna
no fue un disco perfecto, pero tampoco se trató de un rotundo fracaso; sí marcaba un cambio y denotaba madurez, pero este corría de manera inofensiva, como una versión light de agrupaciones como Men I Trust o Mr. Twin Sister, buscando darle un toque sofisticado al pop, haciendo música accesible pero que guardara cierta integridad artística, que te hiciera bailar y al mismo tiempo reflexionar y absorber la música más allá de su ritmo movido. Con sus bajeos llenos de groove y guitarras con un inconfundible toque de chorus ochentero, esta placa se mantenía uniforme, sin mucha fluctuación emocional -musicalmente hablando-, salvo por unos cortes acústicos. Probablemente compararlo con East and West de Anna Domino sería darle mucho crédito, pero, en su defensa, ese álbum sí viene a la mente como punto de referencia durante el transcurso de cada una de las canciones.

El único estancamiento en lo que pudo haber sido un recorrido sin percances, caía en manos de "Buen Amigo (Interlude)", por su intento de crear un intermedio cargado de angustia, pero que sonaba excesivamente melodramático; su entrega era un cringefest de dos minutos con quince segundos, en el que una quebradiza voz masculina narraba los pestiños de intentar ser la mejor versión de uno mismo, repitiendo sin reserva la palabra "amigos", como si MC Dinero hubiese decidido cambiar sus prioridades y comenzara a impartir una doctrina sobre amistad en lugar de hablar sobre finanzas.

Bajo esta nueva presentación, Vanessa pretende realzar el lado más entrañable de los temas originales de Tornaluna, despojándolos de casi toda instrumentación y de la lujosa producción que les daba profundidad y textura; ahora, por medio de un piano, su voz y algunos tenues acompañamientos de cuerdas, la compositora regresa a sus raíces más rústicas. Tornaluna pocket voltea al pasado para reafirmar el proceso de evolución de la compositora tijuanense. El álbum anterior representó un cambio significativo en la madurez de Vanessa quien tomó un rol más activo en la producción, puliendo su talento como una artista capaz de adentrarse en todo aspecto de la grabación y composición y no en sólo llegar al estudio con maquetas para que alguien más las forjara desde cero.

La presencia que tiene la voz de Zamora dentro de la mezcla, y la falta de retoques en post-producción, deja en evidencia que a pesar de todo este tiempo, a la canta-autora aún le es difícil dejar atrás esas cadencias y entonaciones que la hacen sonar a Julieta Venegas; si bien es obvio que muchas personas tienen voces similares, la manera de re-acomodar las sílabas tónicas en varias palabras es lo que sigue haciendo que las comparaciones sean inevitables y esto se hace presente desde el segundo track, "Puro Pasado - Piano Version", donde la estrofa inicial (CO-rrí tan fuerte HA-sta'l-CAN-zar tu voz) suena a algo que la veterana tijuanense habría cantado en o en Limón y Sal.

Los temas que son interpretados en el piano, parecieran tener el mismo andar, pues todos están conformados de palpitantes acordes con ligeros contrapuntos en el registro bajo, y en algunos casos, la falta de dinámicas resalta la importancia de los arreglos y hace que se llegue a extrañar el sonido más pulido de sus contrapartes en Tornaluna.

"Callar" destaca de entre el resto, con su delicado ostinato de guitarra, y esa discreta, pero cómoda, cama creada por las cuerdas que se extienden por toda la canción. La sencillez de este track puede recordarnos a esa Adele circa 19 y es interesante recalcar cómo es que esta versión -la cual es un demo- se siente más completa que su versión final. Este dimorfismo recae principalmente en la parte final de la canción; en el corte que aparece en Tornaluna, "Callar" -aparte de carecer de las emotivas cuerdas- cerraba con un alegre pasaje al que se le sumaban los demás instrumentos y que no encajaba del todo pero, al mismo tiempo, tampoco sonaba tan fuera de lugar; en cambio, en este álbum, al incurrir en un ligero cambio de compás en el rasgueo antes del cierre, el final suena más orgánico.

Decir que este álbum es mejor al anterior -o viceversa- es inútil. Se trata de fases distintas y ambas cumplen su propósito. Para los que pudieron pensar que Tornaluna sonaba sobre-producido, la austeridad y la calidez de estos temas los dejará más que satisfechos. Para quienes piensen que este álbum tiene buenas ideas pero necesita más pulso, pueden referirse al compilado anterior, en donde Zamora explota su talento como productora revelando un oído bastante fino para detalles sonoros que embelesen y llenan de dinamismo a cada track.

Tornaluna pocket, en palabras de la compositora, es un disco "hecho con mucho amor" y realmente se siente el empeño de Vanessa hacia sus creaciones. La sinceridad con la que cada pieza fue confeccionada y ejecutada es completamente palpable y a pesar de no ser su primer álbum, aún se puede percibir esa entrega de alguien a quien por primera vez se le ha dado la oportunidad de grabar su material. Este EP supone una regresión a una instancia más básica y más sencilla para la canta-autora tijuanense, una que deja al descubierto el corazón y el ímpetu que la ha movido desde sus inicios.